En el Perú queremos a Fujimori... en la cárcel. Aparte de la triste historia de la cándida Malú y su novio desalmado, si hay algo que esta uniendo a todo el Perú es el antifujimorismo, cuya manifestación más elocuente es el multitudinario pedido de extradición y castigo al peruano-nipón.
Sin embargo así como el fujimorismo es algo que no se puede definir con precisión, aún tomando en cuenta sus notorios aciertos como las groseramente notorias demagogia, cultura chicha y corrupción que exhibió el régimen, el antifujimorismo aparece también impreciso por las distintas valoraciones y lecturas que se hacen de la década naranjista, aunque en su gran mayoría se identifiquen con anhelos demócraticos. Esto se hizo folklóricamente notorio en la multitudinaria manifestación del martes 15.
Si bien los colectivos estudiantiles, de DD.HH., y los gremios sindicales fueron la aplastante mayoría de esta manifestación, no faltaron grupúsculos de todo sabor incluyendo pro-senderistas (reconocibles por la típica Hoz y el Martillo) y pro-alienígenas:
Aunque los partidos tradicionales y sus candidatos naturales no estuvieron oficialmente presentes en la marcha (y no precisamente por simpatizar a los fujimoristas), los partidos que no faltaron aprovecharon la oportunidad para hacer alguito de campaña proselitista, no sin sorpresas:
Interesante coctel el de las grandes marchas. Lo preocupante es ver como se canaliza este legítimo clamor de justicia por ciertos cauces para publicitar ciertos proyectos políticos que ya se pusieron en práctica en el Perú y que no nos llevaron precisamente hacia el paraíso (dictadura de Velasco). Como siempre recurriendo al discurso "anti" (el recurso facilón de echar la culpa de nuestras desgracias al de afuera):
En la imagen de Fujimori se están concentrando toda clase de pareceres y sentimientos, muchos de ellos contradictorios y que revelan más bien una tendencia hacia el radicalismo mas irracional que capitaliza los sentimientos (legítimos) de rabia e impotencia ante la impunidad. Se esta perdiendo la sangre fría que necesitamos para elegir concienzuda y democraticamente nuestro destino como nación. Una muestra de ello es la opción por el mesianismo que exhiben ciertos personajes de nuestro escenario político-farandulesco. Como el que vemos expresado, por ejemplo, en el apoyo creciente a la propuesta nazionalista de Ollanta Humala quien se estaría aliando con los muchachos de Patria Roja para la conformación de otro Frente Amplio. No sería sorpresa. Los extremos siempre se tocan.
es notorio el empuje que dan los grupos de izquierda pero aun asì siempre son apaleados en las urnas. la gente no es tonta.
ResponderBorrarno hay motivo para tanta alarma salvo si el chino se sale con la suya y se libra de rendir cuentas.
Sangre fría para decidir, es algo que los peruanos nunca tuvimos y al parecer no tendremos.
ResponderBorrarMientras continuemos con una pobre educación pública y aquella paupérrima escala de valores, no es secreto para nadie que los votos siempre se orientaràn al que regale mas paquetes de fideos.
Saludos
ResponderBorrarCómo le gusta acusar a todos con el dedo levantado... "pro-senderistas (reconocibles por la típica Hoz y el Martillo)" ¿Acaso todo comunista es un prosenderista? ¿En serio lo piensa? Y luego habla de demagogias agenas... Supongo que por gente así es por lo que algunos hemos sufrido muchos prejuicios. Mucho daño han hecho los grupos violentos a todas las corrientes de pensamiento.
Supongo que las utopías en que todos soñamos no se deben dejar de perseguir porque alguien metió la pata hasta el fondo...
Es una lástima lo que está haciendo últimamente patria Roja (bueno, lleva periodos muy malos, pero parecía que se estaban centrando un poco -no hablo de centrismo político, sino de coherencia interna- pero cada vez que llegan las elecciones vuelven sus radicalismos sin vistas a ninguna parte y parece que ahora le toca la elección de malos compañeros de cama). Una cosa es el discurso izquierdista y otra distinta los planteamientos izquierdistas (sin colgarme la medalla de repartir carnés de izquierdista, claro), lo hemos visto otras veces con otros movimientos... Y sí, los "extremos" (y aunque no sean tan extremos aunque sí totalmente contrarios) se tocan, recuerdo a ese APRA haciendo pacto con los Odriístas contra un reformador de "centro-derecha", curiosidades de la política.
Lo "bueno" (malo) de plantear los "Anti", es que todos caben ahí, aunque sean polos opuestos, a fin de cuentas, se trata de unirse para atacar una posición, no para plantear una alternativa, y atacar una posición es fácil (simplón), sobre todo cuando no se busca en esa unidad construir una alternativa (ahí es donde se ve esa heterogeneidad). Pero también se vio en las manifas "contra la corrupción", había de todo (sirven para enterarse de movimientos más que minoritarios, pero curiosos o con razón en lo que buscan-quieren, al menos bien razonado).
Por otro lado, el que tengamos la obligación de votar no ayuda para construir una conciencia de la importancia del voto...
Hasta Luego ;)
Todo comunista sostiene esencialmente lo mismo que el senderismo: la toma del poder para hacer la "revolución". No es por nada que el nucleo de sendero surgio en el PCP (Partido Comunista del Peru). Sendero recurrió a la violencia sin contemplaciones, lo que quizá le diferenciaba del resto de sus camaradas pero quienes muchas veces no podían ocultar su simpatía por tan ortodoxa metodología.
ResponderBorrarLamentablemente la inacción e ineficacia del gobierno, elevadas a la enésima potencia por la publicidad gratuita que le hacen los medios, hacen que la gente vuelva sus ojitos hacia las alternativas inmediatistas y radicales que proponen no sólo los devotos de la revolución. Sabrán para quienes trabajan todos esos chicos?
Saludos
ResponderBorrar«la toma del poder para hacer la "revolución".» Creo que los medios y las justificaciones diferencian mucho. Es un error meter a todos en el mismo saco, porque, básicamente, todos los grupos buscan la toma del poder (de una forma u otra) para conseguir su particular utopía (salvo los que la buscan sólo para llenarse los bolsillos, ese es otro tema, y es un cáncer en todos los movimientos). La "revolución" no es necesariamente violenta, ni la toma del poder así, ni siquiera tiene que ir contra el sentido formal de la democracia, no interpretemos una línea concreta de pensamiento con todas las que existen. Por favor Don Guille, sé que usted no es tan simplista. Es como si yo dijera que toda la derecha es fascista, sobre todo la derecha cristiana ¿A que no es así? Si lee un poco las publicaciones de finales de los 60s hasta el comienzo de la Monarquía Parlamentaria en España del Partido Comunista pocos escritos que hablen de "violencia" encontrará, entre otras cosas, hay un rechazo bastante frontal (no diré que no existan los violentos, pero es tonto englobar un movimiento sólo fijándose en ellos) al sistema de partido único (incluso, es un partido que nunca ha pedido que se ilegalice otros partidos) y se pedía la convocatoria de elecciones abiertas a todos los partidos. ¿Eso es un método violento de conseguir el poder? ¿Están justificando el terrorismo? ¿El que hayan rechazado al Grapo significa que están(estaban) a su favor?
Además, piense que los métodos de gobiernos con los que comulga NO SON DISTINTOS a los de SL, no en la esencia de poner la violencia como recurso fácil para conseguir un fin. La guerra de Iraq sería un buen ejemplo (sobre todo si nos fijamos en la razones oficiales para realizar la toma de Iraq y la justificación jurídica de la misma). ¿Que es una cuasa justa? Bueno, eso lo pensaban los de SL. Ahora, no por cosas como ESA (u otras) guerra (s) uno puede decir que toda la derecha usa la violencia para conseguir objetivos... ¿No le parece?
Hasta Luego ;)