El programa ha tenido gran impacto social en Bolivia donde se celebra que haya asistido a miles de danmificados por las lluvias. Sin embargo es dificil creer que no tenga sus costos. El Colegio Médico Boliviano afirma que el gobierno de Evo Morales está costeando la permanencia de los galenos cubanos y venezolanos, cuando bien podría emplear al personal nacional desempleado. De hecho, se ha llamado para estos días a una huelga de 24 horas en rechazo a la presencia de los 700 colegas cubanos.
Por si fuera poco, se han producido denuncias de acoso sexual y otros atropellos cometidos por personal cubano, muchos de ellos en estado de ebriedad (el alcoholismo afecta a buena parte de la población cubana). El gobierno boliviano no parece ejercer control ni supervisión sobre el personal extranjero de la operación.
Los defensores del programa argumentan que los profesionales bolivianos no estarían dispuestos a asistir "gratuitamente" a esa población pobre y marginada. Esto muestra que existe estado de polarización y conflicto al interior de la sociedad boliviana que, en lugar de resolverse, se radicaliza gracias a estos gestos humanitarios (lease: propagandísticos).
Pero ¿Qué tanto le cuesta la caridad a Cuba? ¿Qué gana el régimen de Fidel con tal esfuerzo?
La exportacion de doctores ya es la principal fuente de divisas del regimen de Castro. La salud pública cubana, que hasta ahora era el orgullo de la revolución castrista, se deteriora a marcha acelerada. La escasez de médicos provocada por el envío a Venezuela y otros países de miles de profesionales como fuente de divisas causa una grave crisis asistencial. Muchos espacios y locales de salud para los cubanos se han desmantelado para ofrecer atención a los extranjeros beneficiarios de la "Operación Milagro". La desprovista población cubana queda rogando por un milagro.
El doctor Alcides Lorenzo Rodríguez, jefe del grupo nacional de medicina familiar de Cuba, que fue persona de confianza de Fidel Castro, dice que en los dos últimos años se ha registrado un importante retroceso en la atención primaria por la dirección acientífica de la Salud Pública y del voluntarismo político de Fidel Castro. "El sistema de salud quedó supeditado a la relación con Venezuela, la atención primaria retrocedió a los años setenta. La escasez de medicinas es importante desde los años noventa, pero se ha acentuado por los cuantiosos envíos a Venezuela. Es de conocimiento de todos".
El petroleo que obtiene Fidel por esta transacción le esta sirviendo para financiar otras dádivas. La Habana envió 10.000 televisores y 4.400 reproductores de vídeo a Bolivia, los cuales se utilizarán en una campaña de alfabetización con asesoría cubana. Para comprender lo sospechoso de este programa baste con saber que la educación cubana es paradigma de adoctrinamiento, que crea ciudadanos dóciles para un régimen totalitario. Más de una autoridad cubana ha mostrado su preocupación por el producto de tal sistema
Siendo que los propios cubanos quedan relegados a una situación precaria que empeora, se entiende que los gestos del dictador van más allá de la mera caritativa. Junto a su discípulos Chávez y Morales estan dispuestos a organizar un nuevo eje revolucionario en cuya cohesión estan trabajando, y estos programas "humanitarios" (como su apoyo al candidato Ollanta Humala en Perú) no pueden ser ajenos a estos planes.
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